“Cuento con la experiencia de conciliar y reconciliar”

SANTIAGO CREEL MIRANDA Y SU ASPIRACIÓN PRESIDENCIAL

“Una coalición es un nuevo sistema de gobernar en unidad”.

Por Hiram Valdez Chávez

“Quiero, puedo y debo”, responde categórico Santiago Creel Miranda ante la pregunta si está preparado para ser Presidente de México.

En seguida lo argumenta:

“Quiero porque no estoy dispuesto a que nuestro país vaya por el camino del autoritarismo, de la pobreza y de la desigualdad, y particularmente de la violencia”.

“Puedo porque cuento con la experiencia de casi 30 años de servicio público con una hoja limpia en la prestación de servicio público y además he estado en el cargo más importante que es ser Secretario de Gobernación y encargado de la política interior, de la estabilidad del país y particularmente de la seguridad interna”.

“Debo porque todo se lo debo a mi país, también a mis hijos, a mis nietos, a las familias de todas y todos las mexicanas y mexicanos, por sacar un país adelante del cual nos podamos sentir orgullosos de su gobierno”.

“Cuento con la experiencia legislativa, con la experiencia de conciliar y de reconciliar, de hacer acuerdos y crear instituciones”, subraya.

En la entrevista con la Revista Legisladores de México habla de la Alianza Va por México donde confluyen PAN-PRI-PRD y de una coalición electoral.

Santiago Creel quien actualmente es presidente de la Cámara de Diputados, expresa que para presentar una alternativa  diferente frente al actual gobierno, la alianza representa la renovación de un sistema de partidos que se traduce en una coalición electoral, después de una coalición de gobierno y finalmente soportado por la coalición legislativa.

Luego precisa que “gobernar en un sistema de coaliciones es entrar de lleno a la modernidad como acontece en la gran mayoría de los países europeos y de oros continentes.

“Una coalición es un nuevo sistema de gobernar en unidad, pero reconociendo la diversidad que aporta cada uno de los partidos y la sociedad en pleno”.

LA ENTREVISTA

¿Cómo analiza los tiempos políticos en México?

Son los tiempos de final de un sexenio en donde la política se intensifica, la competencia se fortalece y empiezan a surgir aspirantes o precandidatos, lo que pone el foco de atención ya más en el 24 que en cualquier otro aspecto de la política.

¿Está usted preparado para ser presidente de México y si llegara a ser presidente cuales serían sus principales objetivos?

Quiero, puedo y debo. Quiero porque no estoy dispuesto a que nuestro país vaya por el camino del autoritarismo, de la pobreza, de la desigualdad y particularmente de la violencia. Puedo porque cuento con la experiencia de casi 30 años de servicio público con una hoja limpia en la prestación de mis servicios públicos y además he estado en el poder ejecutivo en el cargo más importante que es ser Secretario de Gobernación y encargado de la política interior, de la estabilidad del país y particularmente de la seguridad interior.

En esos tres rubros mis resultados están a la vista de todos, particularmente en el combate a la violencia, por lo que hace a la seguridad interior tuvimos un avance muy significativo de una disminución del 30 por ciento lo que me da el acreditamiento para poder enfrentar al mayor problema que vive el país.

Cuento con la experiencia legislativa, con la experiencia de conciliar y de reconciliar, de hacer acuerdos y crear instituciones y también, por supuesto, debo, porque todo se lo debo a mi país, también a mis hijos, a mis nietos, a las familias de todas y de todos los mexicanos por sacar un país adelante del cual nos podamos sentir orgullosos de su gobierno, no solamente mexicanas y mexicanos, sino ante el mundo ahora que estamos en un mundo completamente globalizado y la imagen de México está muy deteriorada por el actual gobierno cuando defiende a las dictaduras de Nicaragua, de Venezuela y de Cuba y cuando rompe tratados comerciales, tratados de medio ambiente y también de derechos humanos.

Por todo eso, siento que tengo la obligación por la experiencia y por el deseo de cambiar el rumbo del país, de seguir adelante mi aspiración de buscar, primero, la candidatura y después la presidencia de la república.

¿Qué representa para usted como panista la alianza con el PRI y PRD?

Representa el privilegiar el interés superior que es México sobre los intereses partidistas o de grupo. Representa un nuevo camino, una alternativa diferente frente a la del actual gobierno. Representa la renovación de un sistema de partidos que se traduce en una coalición electoral, después en una coalición de gobierno y finalmente soportada por una coalición legislativa.

Una coalición es un nuevo sistema de gobernar en unidad pero reconociendo la pluralidad y la diversidad que aporta cada uno de los partidos y la sociedad en pleno, goberar en un sistema de coaliciones es entrar de lleno a la modernidad como acontece en la gran mayoría de los países europeos y de otros continentes.

Las coaliciones llegaron para quedarse, no hay un partido que obtenga la gran mayoría de votos para poder llevar a cabo un programa de gobierno, para hacerlo se requiere una concertación plural de tal manera que el gobierno tenga rasgos de los distintos grupos sociales y regiones del país y de la inmensa y rica diversidad con que contamos en México. Eso es lo que aporta la alianza o coalición Va por México integrada por el PAN, PRI y PRD.

¿Con la experiencia en la política, como ex secretario de Gobernación como abordaría la inseguridad en México?

En primer lugar reconociendo que es el principal problema que tenemos en el país que se deriva de la inseguridad y que se llama violencia, por qué, porque la violencia atenta contra la vida que es el valor superior de una persona y que una vez que se pierde es absolutamente irreparable y el dolor es infinito para sus seres queridos, en consecuencia es el más grave mal que tenemos y lo abordaría de la siguiente manera:

Esa violencia alrededor del 80 por ciento proviene del crimen organizado. Lo primero sería buscar combatir al crimen organizado para bajar la violencia y eso se requiere hacerlo con una policía de mando civil, especializada, con equipo, armamento y sobre todo inteligencia, que pudiera  colaborar con los estados amigos que padecen ese mismo problema, con Colombia hasta Canadá y ponernos de acuerdo en una conferencia continental para poder sacar adelante este problema que es por una parte transnacional, y por otra parte a nivel nacional que es esta policía anticrimen organizado que en otros países ha dado buenos resultados y que permite combatirlo  con mayor eficacia, dado la especialización con que contaría esta policía.

Por otra parte, para los delitos comunes, los delitos de calle, buscaría fortalecer  policías locales, policías estatales, no sin antes establecer nuevas bases de coordinación, definiciones claras de competencias, tanto en los ámbitos municipales, locales, estatales y federales, y por supuesto también a lo que se refiere a los delitos.

Esta es una labor conjunta en donde debe haber exámenes de confianza, capacitación y todo aquello que le permita al policía desde salarios dignos y prestaciones, así como contar con el equipo, el armamento, los seguros de vida y todo aquello que le de la seguridad para desenvolverse con eficacia en el desempeño de sus funciones.

Cuauhtémoc Cárdenas opinó que no le ve forma a la 4T, ¿usted coincide con el Ingeniero?

Coincido en el sentido que la 4T no va a ninguna parte, sin embargo, la forma de la 4T es autoritaria, insensible a los problemas reales del país, que son la pobreza y la desigualdad, los intereses creados, la violencia desbordada, prácticamente por todo el país y la supresión de un sistema de salud que venía funcionando y un sistema educativo mermado que  no se recupera por la deserción y particularmente los dos años que estuvimos en pandemia con obstáculos muy serios para alumnos, profesores y todo el sistema educativo.

En materia de energía estamos cada vez peor, con energía cara y contaminante.

En términos de inversiones, prácticamente nos hemos regresado 25 años atrás y si hablamos del ingreso de las personas estamos en los niveles que teníamos en el 2015. El retroceso es claro y por lo tanto, formas autoritarias, retroceso social y económico son las nuevas formas de gobernar para la 4T.

¿Usted cree que el Poder Legislativo ha avanzado en México?

Ha avanzado en el sentido de contar con una oposición que ha podido frenar las reformas más perjudiciales que México hubiese tenido en materia de desarrollo económico, en materia de desarrollo democrático.

En primer lugar la reforma eléctrica que hubiera sido un desastre en el costo de la generación de energía, un desastre en la contaminación, además de que incumplimos los tratados al medio ambiente, fundamentamente los Acuerdos de París e igualmente los tratados comerciales con Estados Unidos y Canadá, al igual que con la Unión Europea y Asia.

Una reforma electoral  que nos regresaba prácticamente a los años 60’s donde un partido gobernaba al árbitro electoral  en su integralidad, se pudo frenar esa reforma como también la militarización del país que atenta directamente contra los derechos humanos y contra los valores y principios de nuestra democracia.

Por otra parte y ese es el otro lado de la moneda, la mayoría no ha honrado su representación nacional que ostenta y ha sido un apéndice del Poder Ejecutivo el cual les instruye a que las iniciativas que les envíe no se les mueva una sola coma.

Por una parte, el Congreso es de enormes contrastes, una oposición dando una batalla difícil, frenando las reformas perjudiciales al país, pero por otra, una mayoría que insiste una y otra vez, y a veces entra por la puerta trasera con legislación inconstitucional que la oposición en ejercicio de su derecho que le asiste como minoría dentro de la Cámara impugna esas reformas que son y vienen por la puerta de atrás, cuando las reformas constitucionales no prospera impugna ante la Corte y afortunadamente la Corte está haciendo su papel y la está anulando por ser inconstitucionales.