29.9 C
Guadalajara
13 de marzo de 2025
OPINIÓN

¿Qué tan de izquierda será el gobiern o de Claudia Sheinbaum?

SU GÉNESIS ES LA LUCHA ESTUDIANTIL EN LA UNAM

Por Francisco Javier Ruiz Quirrín

Existe el convencimiento de que no se es crítico sistemático de Andrés Manuel López Obrador porque se sienta algún desprecio por su persona. En otras palabras, no hay nada personal. Lo que en realidad existe es una razón ideológica.

Nos detenemos en las expresiones de muchos que recientemente aseguran que los temores sobre la imposición de una dictadura o propósitos de un régimen totalitario en esta denominada “cuarta transformación”, fueron solo fantasías en nuestra mente.

Los hechos están a la vista, pero todos aquellos que pueden ver y no quieren hacerlo, no los ven.

Y sobre Claudia Sheinbaum, hasta ahora –se reitera- consideramos que ha actuado de manera responsable y mesurada y que aparentemente ha contradicho al Presidente en algunos propósitos, pero si ya sentada en el poder se confirma su radicalismo ideológico mayor que el de AMLO para conducirnos al régimen de Estado a cargo de una sola persona, igual se le criticará.

Algunos observadores han llegado a la conclusión de que la primera mujer Presidenta de México, será mucho más radical que López Obrador, por razones ideológicas. Sus orígenes en el activismo político, se circunscriben a la lucha de la izquierda radical en la Universidad Nacional Autónoma de México.

Habría además que añadir algo que pudiera marcar una diferencia: AMLO tiene en su ADN al PRI y esto pudo haber sido determinante en la aplicación de los programas asistenciales y su traslado a un régimen regresivo de 50 años atrás, cuando había una “dictadura perfecta”.

Claudia no tiene en su ADN el PRI, pero sí en su torrente sanguíneo transitan las ideas de los más grandes pensadores de izquierda en el mundo. Y estos últimos dejaron establecido un sentido común: La creación de un “paraíso de los trabajadores” bajo un mando único: El Estado.

No pecamos si repetimos aquí que la señora Sheinbaum es una incógnita a partir del día 1 de octubre, cuando inicie su mandato. El deseo es que sus capacidades, inmensamente superiores a las de López Obrador, le permitan tomar decisiones más inteligentes y eficaces en diversas materias sensibles al pueblo de México, como en la seguridad pública, la salud y la economía.

Claudia no tiene en su ADN el PRI, pero sí en su torrente sanguíneo transitan las ideas de los más grandes pensadores de izquierda en el mundo.

Por lo demás, el fracaso gubernamental de López Obrador está a la vista:

1.- Un millón de muertos si sumamos los más de 800 mil por la pandemia de COVID-19 y los más de 190 mil asesinatos que hacen de este sexenio el más violento de la historia. Esa cantidad de muertos se asemeja a los registrados en la revolución mexicana que inició en 1910.

2.- Un sistema de salud colapsado, con el frustrado INSABI y el desabasto de medicamentos que hizo mucho más vulnerables a los más pobres, que por cierto aumentaron en número de manera considerable. Se considera que regresamos a los 50 millones de compatriotas en la pobreza. La “cantada” MEGAFARMACIA, se ha sumado a los fracasos sexenales y quedaron cuarenta millones de personas desintegradas a un sistema de salud.

3.- La inmensa mayoría de organismos autónomos, creados en su momento para democratizar al país y reducir los excesos en el mandato presidencial, han desaparecido. Solo falta la COFECE, el INAI y el INE de ser controlados desde palacio nacional.

4.- Las obras faraónicas de AMLO, como el Aeropuerto Internacional “Felipe Ángeles”, el Tren Maya y la Refinería de Dos Bocas, a pesar de invertir en ellas casi el billón de pesos, han resultado un estrepitoso fracaso.

5.- La economía pende de un hilo y de la voluntad que en su momento ejerza el gobierno de los Estados Unidos. Las gasolinas han aumentado de precio, el gobierno no desapareció el Impuesto Especial sobre Productos y Servicios y la inflación ha permitido que la canasta básica para el consumo familiar haya aumentado en los últimos tres años hasta en un cien por ciento.

6.- El sistema educativo en educación básica fija su enseñanza en cuestiones de tipo ideológico, haciendo a un lado las matemáticas, la ciencia y el fomento a la investigación. El gobierno federal desprecia toda aspiración para que el estudiante se supere, los exámenes han empezado a olvidarse y el promedio general reprobatorio supera la media considerada así por los países integrantes de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).

7.- Los mensajes de odio dictados por el Presidente desde su “mañanera” en palacio contra medios de comunicación, hicieron mucho más vulnerables a los periodistas independientes y críticos. Durante este sexenio van más de 34 reporteros asesinados.

8.- En México, no se tiene registro de un Presidente de México que haya violado tanto la Ley en campaña electoral, ni que en forma abierta y descarada haya luchado por controlar al Poder Judicial Federal, entrometiéndose en su operatividad y funcionamiento.

Finalmente, ante la apuesta de muchos por un sexenio mucho más radical ideológicamente a partir del 1 de octubre, esperemos que la inteligencia marque una diferencia para retomar el camino del orden, el respeto y la defensa de las libertades en nuestro país.

 

POST RELACIONADOS

El radicalismo viene de la izquierda

Legisladores de México

La sumisión del poder económico al poder político

Legisladores de México

El gran desafío de Va por México

Legisladores de México

Este sitio web utiliza cookies para mejorar su experiencia. Asumiremos que está de acuerdo con esto, pero puede optar por no participar si lo desea. Aceptar Leer más