CULTURA
Por Violeta Moreno
Como alguna vez comentamos las dos principales industrias nacionales por excelencia de bebidas espirituosas son el tequila y el mezcal, y tal vez sobre todo los jaliscienses, o las personas de determinadas generaciones mayores entendemos la cultura que tiene que ver con el tequila, pero existe el mundo emergente del mezcal.
En esta ocasión me gustaría que me acompañen a ver algunos datos y contextos de la cultura del mezcal. Qué representa económicamente, en qué estados predomina, incluso por encima del tequila, y varios puntos culturales de referencia.
A pesar de que emanado del sincretismo tenemos muchas bebidas destiladas (el destilado es un proceso que se creía no existía, antes de la conquista en América, y a pesar de que se demostró ya en estudios recientes que si existió desde antes de la llegada de los españoles, los destilados se ven como las bebidas sincréticas por excelencia) de plantas originarias de diferentes regiones, como el sotol, la raicilla, el bacanora, entre otros, uno se destacó de todas las demás porque alcanzó la denominación de origen igual que el tequila, por lo que más miradas voltearon a verla.
El tequila logra la denominación de origen en 1974 para varios estados liderado por Jalisco, al mezcal se la otorgan en 1994 igualmente varios estados liderados por Oaxaca que se considera la cuna del mezcal por excelencia pero que cuenta con más estados en su haber cómo son Durango, Guerrero, Tamaulipas, Guanajuato, Zacatecas, Michoacán y San Luis Potosí.
Tal vez por la misma idiosincrasia de Oaxaca, que es un estado que destila, en sí mismo misticismo, se cree más espiritual el origen del mezcal que del tequila, y a su vez el mezcal sigue no siendo muy aceptado en tierras tequileras, por lo que imagino a veces a México siendo la nación joven que es y con la falta de madurez cultural y aceptación que se da en la madurez humana hasta de los países, ya sea que seamos blancos o morenos, todos los que nacemos y crecemos en esta hermosa nación tenemos un pensamiento sincrético que combina las tradiciones indígenas y su visión del mundo combinada con el pensamiento occidental, esta mezcla nos da el tan famoso “porque soy mexicano”.
Entonces a pesar de que el mezcal es una bebida muy parecida en el origen al tequila, tanto español por la preparación, con un destilado más sofisticado desde la conquista, como por la utilización de plantas originarias de este territorio, en este caso diferentes tipos de agaves.
El 63 % de su producción total de más de 7 mil millones de litros al año se destina a la exportación, sobre todo a Estados Unidos que es el principal mercado de esta bebida nacional, como el tequila donde también tiene un lugar preponderante en el paladar entre nuestros principales socios comerciales a nivel mundial.
Cohetero Villegas comenta que después de la pandemia los productores de mezcal han conocido las bondades de comercio en línea por la falta de interacción humana que tuvieron que vivir con sus clientes y el 50% de los mezcaleros se han unido a las filas del e-commerce.
La industria del mezcal genera anualmente cerca de 16,000 empleos directos y alrededor de 48,000 indirectos solo en Oaxaca. De la producción total, 63.17% se destina a la exportación, con un valor de 5,433 millones de pesos (mdp) y el resto, 36.82%, es para consumo nacional.
Y lo dicho en otras ocasiones tal vez otras entidades como por ejemplo: Jalisco se está perdiendo parte de un negocio en crecimiento cuando es fácil por lugares como la zona norte del estado que cuenta con los mismos tipos de agaves silvestres que Zacatecas, que sí tiene acceso a ser parte de la industria del mezcal, por dar un ejemplo, o como Nayarit que colinda con la misma zona serrana que tiene acceso a estas especies endémicas, o como Tlaxcala que se ha descubierto que ya generaba algunos destilados desde antes de la conquista, por lo que perfectamente podrían encajar, para tener la aceptación necesaria y ser parte de un negocio que como muchos nacionales son una beta importante de acceso al desarrollo y crecimiento derivado.