LOS ESCENARIOS DE LUCHA DEL PODER MUNDIAL
El escenario mundial hoy, muestra a un imperio norteamericano aún fuerte, pero en decadencia.
- LA PARTICIPACIÓN DEL IMPERIO EN LAS GUERRAS EN UCRANIA Y GAZA
- INDIA Y CHINA ACUMULAN CON EL BRICS+, UN TERCIO DE LOS HABITANTES GLOBALES
- EL GENOCIDIO DE ISRAEL EN GAZA GOLPEA LA IMAGEN DE EEUU
- IRÁN Y LOS HUTÍES DE YEMÉN BLOQUEAN EL MAR ROJO Y EL GOLFO PÉRSICO
Cayetano Frías Frías
Hay dos imágenes que seguramente nunca se borrarán de la memoria de la humanidad. Una, la fotografía de la NASA a la tierra que difícilmente se distingue en el abismo del espacio, tomada aproximadamente a 6 mil millones de kilómetros de distancia y la cual fue definida por Carl Sagan, como “una mota de polvo suspendida en un rayo de sol”.
“La tierra no es más que un pequeñísimo grano, en una vasta arena cósmica. Piensa en los ríos de sangre, derramados por esos generales y emperadores, para que en la gloria y el triunfo, convertirse en los amos momentáneos… de una fracción, de un punto”, escribió Sagan.
La segunda, es una videograbación reciente, en la cual se observa a colonos israelíes orinando dos cadáveres desnudos que tienen cubiertas las cabezas con bolsas oscuras, tras lo cual patean los cuerpos en un arranque grotesco, que refleja la involución mental de los actores de esa infamia.
Es imposible entender cómo la ambición y las guerras detonan lo peor de los sentimientos humanos. Más difícil creer que existe un Dios, el cual de entre los miles de millones de galaxias y planetas que conforman el universo, se decantó por elegir como su preferido a un pueblo, para entregarle una microscópica porción de esta mota de polvo.
La diferencia con el mundo de hace 20 años, es que en el escenario han irrumpido China como la mayor potencia económica y Rusia como la más modernizada en potencia y experiencia militar. La alianza de países occidentales, representada por la OTAN, aún no digieren que la influencia de poder político y militar ya no es de su exclusividad en el plano internacional.
Carl Sagan nos hizo reflexionar sobre nuestra pequeñez ante la magnitud del universo, para concluir que es una mala broma el que existan seres humanos que se sientan superiores, pues los científicos determinaron desde 1940 que las razas no existen. La Unesco estableció desde 1950 identificar a los pueblos como etnias, por lo tanto, tampoco hay superioridad y nadie debería llenarse de soberbia y abrogarse el derecho de asesinar impunemente. Esto se reafirmó al descifrar que la cadena de ADN en todos los humanos es exactamente igual.
Lo que sí existe es la deshumanización y los crímenes de lesa humanidad que se registran en las guerras, aunque todas las personas deberían conservar sus derechos, como establecen los convenios signados por la inmensa mayoría de los países que participan en la Organización de las Naciones Unidas, y que los ejércitos deben respetar.
Es notorio que la humanidad actualmente enfrenta una gran crisis ética. Se nos presenta la oportunidad de reescribir nuestras prioridades, de reflexionar sobre el futuro inmediato y la necesidad de dudar de todo lo que viene de las grandes corporaciones, así como de los gobiernos de todos colores.
Quizá sea momento de escribir sobre la realidad, sin que el dueño de la tinta nos ordene alterar lo que estamos viendo en perjuicio de la humanidad, porque así le conviene a su negocio, a su religión o a sus socios. Porque hasta para pelear en las guerras, existen leyes por encima de los intereses u odios.
RIESGO DE EXTINCIÓN DE LA HUMANIDAD
El escenario mundial hoy, muestra a un imperio norteamericano aún fuerte, pero en decadencia. Sus reacciones desesperadas por mantener la hegemonía, arrastrando en su caída a sus aliados en Europa, Medio Oriente y Asia, han tensado las relaciones internacionales y existe un peligro real de que se generalicen las hostilidades en todo el planeta.
Entre Rusia y los aliados de la OTAN –que utilizan como carne de cañón a los ukranianos-, hay un enfrentamiento formal de ejércitos. En Palestina, el ejército de Israel se enfrenta a una docena de grupos guerrilleros, pero bombardea indiscriminadamente a la población civil, destruyendo sus viviendas, hospitales y centros religiosos en una táctica genocida, con la complicidad de Estados Unidos que los abastece de armamento.
Los gobiernos de los países occidentales que participan en estas guerras, avalan el terrorismo de Estado en que incurren los Ejércitos de Israel y de Ukrania, al atacar las viviendas y edificios de la población civil, donde ni siquiera en sus alrededores existen objetivos militares.
La diferencia con el mundo de hace 20 años, es que en el escenario han irrumpido China como la mayor potencia económica y Rusia como la más modernizada en potencia y experiencia militar. La alianza de países occidentales, representada por la OTAN, aún no digieren que la influencia de poder político y militar ya no es de su exclusividad en el plano internacional.
Por desgracia para el mundo, Estados Unidos y sus aliados han optado por el uso de la fuerza para tratar de mantener su hegemonía, hasta el momento, con muy pobres resultados.
A Joe Biden, aprovechando de que está al borde de la senilidad, le vendieron que Ukrania tenía el ejército más poderoso de Europa y si le proveía de armamento y le inyectaba recursos económicos, con facilidad pondría de rodillas a Rusia. A casi dos años del inicio de las hostilidades y pese al apoyo generoso de los países agrupados en la OTAN, el ejército ruso ocupó más de 100 mil kilómetros cuadrados, les ha causado bajas por entre 350 mil y medio millón de combatientes, se anexó a través de un plebiscito las tres regiones que más aportan al Producto Interno Bruto y amenaza con avanzar hasta Odessa.
Y en el conflicto más reciente, el estado sionista de Israel cuyo ejército se vendía como el cuarto más poderoso del mundo, ha destruido cientos de miles de viviendas a los palestinos, pero no ha podido vencer a una docena de grupos radicales que ni siquiera cuentan con misiles para responder a los ataques que reciben con armas de destrucción masiva. De aquel ejército que en seis días de 1967 triunfó contra varios países árabes, nada queda; hoy han asesinado más de 22 mil personas, de las que más de la mitad son mujeres y niños y del total, más del 90 por ciento son civiles.
Y en el terreno de la propaganda, EU ha sufrido un desgaste brutal, incluso al interior del país, por el genocidio que Israel está cometiendo en contra de la población palestina, detonando protestas en muchas ciudades norteamericanas, así como en el resto del mundo, incluyendo a los países alineados con la OTAN.

Irán y los hutíes de Yemén han intervenido bloqueando el Mar Rojo y el Golfo Pérsico, para impedir que crucen los barcos con destino a Israel, obligándolos a rodear todo el continente africano para llegar a su destino y con ello, elevando exponencialmente las tarifas de seguro de viaje y de transporte de contenedores.
Estados Unidos anunció una operación con el objetivo de inhibir en el Mar Rojo los ataques a barcos con destino a Israel, asegurando que varios países árabes y europeos se sumarían, pero fue desmentido casi de inmediato. Este jueves, hicieron público un comunicado donde EU y países europeos amenazan con represalias a los hutíes yemenís, si persisten en atacar a los barcos. Los ataques han seguido.
El jueves, el primer ministro de Irak, Mohamed Shia Sudani, anunció que pedirán la salida de las tropas de EU y sus aliados de este país, donde se establecieron tras la invasión y sus empresas aún saquean petróleo. Un día antes y tras rescindir el contrato con la Exxon, el gobierno de Irak entregó en concesión su mayor yacimiento de petróleo a una empresa china que lo explotará en adelante.
El peligroso juego que tiene EU al entregar armamento y al estimular a Taiwán para que busque la independencia, ha obligado a China a mantener sus fuerzas militares en alerta. La isla fue reconocida por la ONU como parte de China desde mediados del siglo pasado, por lo que cualquier movimiento militar extranjero en su territorio o aguas de su jurisdicción, sería tomado como agresión al país.
El jueves pasado la Corea pro-occidental denunció que desde la República Popular de Corea se lanzaron misiles, aunque el viernes aclararon que el impacto se registró en aguas fuera de su jurisdicción. Pese a eso, ordenaron evacuar las islas que se encuentran aledañas a esa zona.
Y en África, en julio del año pasado un golpe de Estado derrocó a un dictador “democrático” estilo EU en Níger. Los países vecinos alineados con EU y Francia, amenazaron a los integrantes de la Junta Militar con invadirlos, suspender la ayuda monetaria si no restituían en el cargo a Mohamed Bazoum, a lo cual hicieron caso omiso. A EU le sugirieron que gastara el monto asignado a Níger para someter a Victoria Nuland a un programa para combatir el sobrepeso; en tanto a Francia les expulsaron a los militares establecidos en su territorio.
Otros en discordia, son los militantes de Hezbolá, asentados en la frontera de Líbano y Palestina, los cuales son abastecidos por el gobierno de Irán.

AMPLIACIÓN DE LOS BRICS
En los reacomodos, este primero de enero de 2024, desde el oriente se ratificaron las modificaciones geoeconómicas con la ampliación formal del grupo de países miembros del BRICS, al incorporarse Irán, Etiopia, Arabia Saudita, Emiratos Árabes Unidos y Egipto, que se suman a los países fundadores, Rusia, China, India, Brasil y Sudáfrica.
Resalta además, que India y China son los países más poblados del mundo y acumulan con el BRICS+, un tercio de los habitantes globales, y por consecuencia, conforman un mercado de consumo que dará fortaleza de ingresos y perspectivas de crecimiento económico sostenido a sus miembros.
Las alianzas estratégicas que están fortaleciendo desde el BRICS+, privilegian la cooperación en financiamiento y desarrollo, pero no renuncian al intercambio comercial de armamento, donde paradójicamente a consecuencia de las sanciones occidentales, países como Irán, Brasil, Venezuela, República Popular Democrática de Corea, Emiratos Árabes Unidos y Siria entre otros, han acelerado sus procesos de desarrollo en la industria militar.
Por su parte, las potencias occidentales encabezadas por Estados Unidos, el Reino Unido y la Unión Europea, han optado por tratar de controlar a las economías emergentes y a las subdesarrolladas, a través de sanciones unilaterales, violatorias muchas de ellas del derecho internacional, que van desde sanciones, congelamiento de activos, bloqueo de transferencia de tecnología, robo de empresas de otros países y en casos extremos, hasta pirataje y saqueo grotesco, como han hecho con Rusia, Siria, Irak y Venezuela.
CONCLUSIÓN
En Palestina se está cometiendo claramente un genocidio por parte del ejército sionista. El gobierno de Estados Unidos, contra la opinión pública de sus ciudadanos, ha canalizado el grueso de sus reservas de armamento hacia Israel y por lo menos hasta este fin de semana, no ha enviado un dólar más a Ukrania. Los gobiernos de Europa, también haciendo caso omiso de decenas de millones de manifestantes que reprueban el apoyo a Israel, solapan los crímenes en Gaza.
Pero al igual que en Ukrania, no pueden vencer a los radicales de Hamas y de otros grupos. En 1967 durante la guerra de los seis días, contabilizaron menos de 100 bajas en su ejército. Hasta el sábado habían contabilizado 8 mil 435 soldados israelíes caídos.
Curiosamente, Ukrania e Israel son Estados artificiales. A principios del Siglo XX, cuando Palestina estaba colonizada por Reino Unido. El “dios” que les cedió territorio, se llamaba Arthur Balfour, quien en 1917 se desempeñaba como ministro de Relaciones Exteriores y le envió una carta con esos fines al líder sionista Lionel Walter Rocthschild.
“El gobierno de su Majestad ve favorablemente el establecimiento en Palestina de un hogar nacional para el pueblo judío y usará sus mejores esfuerzos para facilitar el logro de este objetivo, quedando claramente entendido que no debe hacerse nada que pueda perjudicar los derechos civiles y religiosos de las comunidades no judías existentes en Palestina, o los derechos y el estatus político que disfrutan los judíos en cualquier otro país”, cita la misiva.
El Estado de Israel existe desde 1948, luego de la masiva ocupación de colonos provenientes de Europa al concluir la Segunda Guerra Mundial.
La trascendencia de este conflicto, es el peso económico que tiene la comunidad judía en el mundo, tan solo a la familia Rocthschild se le señala como dueña por lo menos de la mitad de la riqueza mundial. Pesa también el factor nuclear, ya que ese país tiene centenares de ojivas, cuyo número es un misterio, pues no reporta ante la Organización Internacional de Energía Atómica.
Los que podrían intervenir en un enfrentamiento directo, son Estados Unidos y la OTAN en favor de Israel, mientras por Palestina entrarían Irán, Líbano y Siria. Arabia Saudita, Qatar, Jordania, Egipto y Turquía, han externado algunos su deslinde y otros solo condenas verbales, aunque los que tengan bases militares de EU los convertiría en objetivos de ataque.
La incógnita es qué tanto contaminaría en otras regiones, como entre las Coreas y Japón; si China retomara el control de Taiwán; quiénes del frente occidental se atreverían a atacar a Irán y Yemén para recuperar el Mar Rojo y el Golfo Pérsico, puntos donde les han abierto un gran boquete al prohibir el tráfico hacia Israel.
En el continente de África también podría influir y los ciudadanos hartos de dictadores con 40 años en el poder soportados por las potencias occidentales, los sacarían del poder.
Y más: ¿de dónde sacarían recursos Estados Unidos y los países europeos que están en recesión a consecuencia de las sanciones a Rusia? Estados Unidos y Japón, están en el top 5 de los países más endeudados del mundo y es improbable que resistan atender tantos frentes de batalla.
La única opción rápida son las armas nucleares, pero Rusia y China también cuentan con ellas, además de que Irán entró en un proceso acelerado para producir sus ojivas. Y el resultado, con miles de ojivas estallando, sería el exterminio de la humanidad.